El Ministerio de Medio Ambiente instauró puestos de chequeo y de control en los diferentes accesos a la zona protegida de Valle Nuevo para hacer cumplir la prohibición de actividades agropecuarias, la cual entró en vigencia desde hoy al vencerse ayer el plazo de 120 días concedido para que fueran cosechados los cultivos ya sembrados.

Sin embargo, justo el mismo día en que vencía el plazo el sacerdote salesiano Rogelio Cruz encabezó un grupo de unas 70 personas que incursionó a la zona vedada para las actividades agrícolas e iniciaron la siembra de papa por la comunidad del Castillo, sin que las autoridades lo impidieran.

La acción puso en evidencia lo que Medio Ambiente quiere evitar, la depredación de las áreas donde se realizan las actividades agrícolas, pues donde el grupo empezó a hacer la siembra se había eliminado la vegetación que cubría el suelo.

El viceministro de áreas protegidas de Medio Ambiente, Dannerys Santana, explicó ayer a EL DÍA que personal técnico y militar había sido apostado en los diferentes accesos a Valle Nuevo para evitar la entrada de equipos de labranzas o insumos para la siembra.

“A partir de este momento no se permiten las actividades agrícolas y el personal técnico y militar está para evitar el ingreso al parque de personas que pudieran dedicarse a esas prácticas”, manifestó Santana.

Entre las comunidades donde se han puesto puntos de control están los accesos por Río Grande, La Siberia, Pinalito, Las Espinas, Malagueta y Valle Nuevo. Esta zona protegida tiene partes en las provincias La Vega, Monseñor Nouel, Ocoa y Azua.

Dannerys Santana informó que la gran mayoría de los agricultores cosechó y vendió su producción, aunque reconoció que a algunos les faltan unos días para completar el ciclo, en especial cultivos de zanahoria.

El funcionario afirmó que las autoridades no atropellarán a nadie y que tampoco se trata de realizar desalojos, pues la disposición es prohibir las actividades agropecuarias. Reveló que dentro del área protegida solo viven unas 40 familias, y que la gran mayoría de los productores vive fuera de ese lugar.

Santana, que al momento de conversar con EL DÍA por la vía telefónica se encontraba en Valle Nuevo, señaló que el ministro Francisco Domínguez Brito conversó con los moradores de las distintas comunidades de las cuatro provincias que tienen acceso al parque para explicarles el alcance de la medida y las alternativas que están a su alcance.

Las autoridades buscan espacios para reubicar a los agricultores.

Agricultores desafiante

El representante de los parceleros, Leonidas Aquino dijo a EL DÍA que más de 300 productores se encontraban reunidos ayer en el lugar para dar inicio a la siembra de papa, alegando que de esa agricultura es que viven y que si no lo hacen morirían de hambre. Además sostuvo que mientras el Ministerio de Medio Ambiente no les ofrezca solución permanecerán en el lugar, porque no tienen para donde irse.

“Nosotros estamos sembrando y no nos paramos de sembrar hasta que no nos busquen una solución, y ya no nos interesa hablar con el señor ministro, que venga el presidente Danilo Medina a resolver esto rápido, de lo contrario, él es responsable de lo que nos pueda pasar a los campesinos”, advirtió.

Aquino expresó que el ministro Francisco Domínguez Brito se reunió con productores y les ofreció un salario de 7 mil pesos y seguro de salud para que sean parte del personal a cargo de reguardar el parque, a lo que la mayoría de los campesinos se opuso, por considerar que la cantidad propuesta no es suficiente para sobrevivir.